martes, 4 de enero de 2011

Gorilas en la niebla

Hoy es un dia muy feliz para todos los que queremos aire limpio en lugares públicos cerrados. El día 2 de enero de 2011 lo marcaré en rojo en el calendario y prometo celebrar ese día como si de mi cumpleaños se tratara. Por fin el gobierno me da una alegría. ¡Por fin!

De todos es sabido la capacidad de improvisación que tiene el gobierno de España sea cual sea su signo político y en este asunto lo volvió a demostrar sacando otra ley anterior que obligó a ciertos locales a realizar unas obras costosas para adaptarse a dicha ley. Muchas de esas reformas fueron tan simples como separar la zona de fumadores del resto con un biombo, en otras se levantaron tabiques, otros optaron por mamparas de cristal y los más listos, oliéndose la tostada, prohibieron directamente el fumar en sus locales adelantándose a la ley actual.

¿Quien devolverá el dinero de dichas reformas? Porque los que las realizaron sí que han sido "estafados" de manera legal y poco ética, esta vez por el gobierno. Una cagada más de Zapatero, su ministro/a de sanidad y asesores. Yo me uniría de buena gana al gremio de hosteleros en alguna manifestación si reclamaran lo invertido en semejante gilipollez reformil.

Pero el daño está hecho y a ellos les corresponde pedir por lo suyo y a nosotros, los no fumadores, brindar sin toser por fin.
El sábado en "La Noria" de telecinco se debatió sobre la ley antitabaco y entre los tertulianos estaba un representante de la asociación de hosteleros que vaticinaba una bajada de clientela debido a la ley. ¡Ole sus huevos! Al parecer "solo" el 30% de la población en España fuma y escuchando las palabras del tertuliano representante el común de los mortales interpreta que los únicos clientes de bares y restaurantes son fumadores, y aseguraba que la gente fumadora preferiría quedarse en casa  para estar fumando tranquilos. ¡Ole sus huevos otra vez!

Me da la impresión que este tipo piensa que la sociedad fumadora sale de casa para fumar. Vamos que la gente que fuma no sale a tomar algo en un ambiente distinto, que la gente que fuma no sale a ligar, que no sale a bailar, que no sale para ver a sus amistades...hoy he pasado por los bares del barrio y tengo que decir que los parroquianos no diferían en número de días anteriores; ni diferirán,sospecho, en los días sucesivos a este. Si los hosteleros juegan a predecir pues yo también, oyes.

¿Qué dicen los fumadores al respecto? Pues que se les trata como apestados, que les recortan sus derechos...
Es que el humo apesta. Se puede fumar, pero no hacer que los demás fumen sin quererlo. El humo se les pega a la ropa que se impregna de ese halo desagradable, el aliento del fumador es similar al de los orcos de Mordor, sus dientes se amarillean, pierden el olfato y mueren muchos cancerosos por culpa del tabaco y las sustancias que le suelen acompañar como ingredientes del pitillo.
Todo esto lo toleraría si estos daños no me afectaran en absoluto, pero afectan y no sabe hasta cuanto el que ya ha perdido el sentido del olfato.

Si a lo largo de los tiempos los humanos hemos estimado que los efluvios corporales, como eruptos,pedos y regüeldos, son de mala educación a la par que completamente naturales no entiendo que el fumador del siglo XXI no llegue a comprender que algo tan artificial como aspirar humo de un cilindro de papel que molesta de una manera terrible y que es nocivo hasta la muerte se prohiba al menos en lugares cerrados. ¿Somos seres racionales o somos animales? Al menos seamos homínidos aunque sean irracionales pero con el día despejado, por favor.

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