viernes, 22 de julio de 2011

LA PLAYA, QUÉ GRAN LUGAR

La playa, ese anhelado lugar por todos, lleno de gente con ganas de follequear, bailar y salir en programas de telerrealidad chupando cámara para decir muchas payasadas por minuto. Todos los veranos nos muestra la tele imágenes de gente guay en chiringuitos guays, donde sólo los más exclusivos y ricachos personajes veraniegos pueden tomarse un caipiriña o un mojito con unas gafas de sol horterísimas, de aquellas que nos hacían reir cuando cursábamos estudios secundarios.

La tele nos muestra imágenes, y muestra las imágenes que les interesa (no sé a quien), tios y tias con cuerpos espectaculares bailando bacalao y mostrando sus únicos atributos (para algo se machacan todo puto año en gimnasios y salas de operaciones). Jóvenes, viejos con gorros publicitarios de explorador, gente de chichas flácidas que agradecen el tener una cámara delante porque es imposible pasárselo bien durante 4 horas padeciendo calor y gentío a pie de playa, frikis afirmando que son los más fiesteros y gente disimulando pasárselo bien jugando a las palas :! ¿Alguien de verdad se lo pasa bien jugando a las palas? ¿Cuáles son las reglas del juego? ¿Quién gana? ¿Cómo se contabilizan los puntos? ¿Por qué las mujeres no son capaces de devolverte 2 pelotas seguidas?,...Sí, es muy triste pero el turista playero busca la ranciedad en su estado más puro.

La tele, en cambio, intenta mostrarnos una España que no existe. La España del buen rollo, del ligoteo fácil, de las vacaciones infames de sol y playa que a mi modo de ver no dan para más de 2 o 3 días.

Todo el mundo sabe que pasa en la playa pero aún asi seguimos yendo, igual que los "heavys" asisten a festivales en España sabiendo que los van a timar de manera descarada.

La playa que conocemos es la del abarrotamiento, la de los chiringuitos con precios infames de la bebida y de pésima calidad de la comida, de hábiles ladrones que esperan el descuido para joderte las vacaciones, la del agua contaminada por orines, cagotes, escupitajos y plásticos de todo tipo de origen y uso. Sí amigos, cada vez que tragáis agua en la playa, hay saliva, productos derivados del petróleo algún mojón diluido, orín...pero ojos que no ven. De hecho la piel se queda guay después de un dia de playa no por el salitre sino por las magníficas propiedades que atribuyen al semen que tiene su máxima densidad a unos 50 metros de la orilla.

El agua está sucia sí, pero hay bichos en las profundidades que "pican" y dan mucho asco...pero ¿qué podemos decir de la arena?
"El jueves", la revista nos hace un resumen de las marranadas que se encuentran en la arena, allá donde se clava la sombrilla cual Amstrong colonizando la luna, donde nos tumbamos a tomar la solanera, donde te entierran para hacer risa, donde juegan tus hijos haciendo castillos o artistas construyen elaboradas figuras mitológicas, esa arena que te revuelven por la mañana con un tractor para no revolverte el estómago al mediodía... en esa arena que por la noche mean y vomitan los botelloneros playeros y rompen las botellas de vidrio como mandan las leyes del botellón, donde se corren aquellos que sus novias no permiten hacerlo en sus cuerpos, allá donde van a parar las colillas que otros han chupado, donde los envases del dia anterior quedan enterrados por el rastrillo del tractor...

Asi que cuando vayáis a la playa acordaos de todo esto y pensad en la gilipollez que es prohibir la entrada en las playas en época estival a los animales de compañia.
¿Qué pasa? ¿Que molestan, que se mean y cagan en la arena, contaminan? En las playas debería estar prohibido la entrada al ser humano que es lo más guarro que ha pisado la faz de la tierra y además incongruente.